La industria en Beas de Granada (1) Fabrica de jabón. Por Ángeles Garrido Garrido (A.G.G).

Hola amigas y amigos lectores comentaristas blogueros y seguidores de mi blog El blog de MA, vuestro blog amigo. Hoy un post en memoria y recuerdo de mi bisabuelo y de mi Abuelo José y tíos. Sobre la industria en Beas de Granada de la Fábrica de jabón. Escrito por mi madre Ángeles Garrido Garrido hija y nieta de los homenajeados en esta historia real de una época de sus vidas. La escribió mi madre para la revista La Capa, numero 8 en agosto de 1.994 que se publicaba en Beas de Granada una vez al año, su director era José García Mesa y la portada de la revista estaba diseñada con el logo del Fraile por Francisco Izquierdo ya fallecido y que colaboraban  en la revista muchas personas de Beas con sus escritos. Hoy ve la luz en mi blog en memoria de mi familia. Yo tengo el gusto de hacer público el relato de esta historia en este espacio de letras ,con el permiso de mi madre que en su día lo escribió . Las  dos imágenes  son mías fotografiadas de la revista La Capa, recuperando lazos de historia y la otra fotografía es del jabón que se hacía en la fábrica  de jabones.

Aquí os dejo este enlace de Mispueblos.es donde podéis leer parte de su obra literaria de mi madre AGG.

 Imágenes de MA Potada de la revista La Capa con el logo de la roca errosiónada por el tiempo y es  llamado El  Fraile.

Imagen de MA. Portada de la revista.

Revista La Capa. La industria en Beas de Granada(1)
Fábrica de jabón, escrito  por Ángeles Garrido Garrido.

En el año 1903 José Garrido López contrae matrimonio en Beas de Granada, forma así una familia y decide trabajar por cuenta propia abriendo una tienda de comestibles. Después la sustituye por una carnicería y un puesto de dulces, con turrones, peladillas, frutas confitadas y otras variedades. A estos puestos se les llamaba "mesillas" y y eran solo para los días de fiesta como San Roque, Patrón del pueblo, San Pedro, la Virgen de Agosto, etc. No contento con esto, porque no daba lo suficiente para las necesidades de su familia, piensa también en el jabón.

Es un hombre emprendedor e inteligente, contrata a un maestro jabonero el cual le enseña a fabricarlo, así comienza esta pequeña industria en su propia casa. Los utensilios son muy simples, unos bidones para el aceite, unos cubos para diluir la sosa cáustica, un pesa-lejías para graduar la sosa, una caldera para hacerlo, unos moldes para enfriarlo, alambres, cepillo, compás, un troquel para cortarlo y troquelarlo, por último cajas para embalarlo. En este proceso algunos de sus hijos, todavía jóvenes, la ayudaban en lo que podían.

La materia prima es el aceite y la sosa cáustica. El aceite tenían que traerlo de los molinos de los pueblos vecinos y en estos mismos pueblos vendían el jabón. En estos años, aproximadamente 1920, es difícil el medio de transporte, se realizaba con ayuda de burros o mulos, por eso deciden fabricar también jabón en Güejar Sierra y así abastecer a toda aquella zona de la sierra. En Güejar Sierra estuvieron un poco de tiempo hasta que compraron un camión quedando así resuelta la dificultad del transporte. Vencido esto, él y sus hijos construyeron una nave en su pueblo natal, Beas de Granada, e instalaron así la fábrica con el nombre "Fábrica de Jabones San José", marca la "La Llave". Así estuvo funcionando favorablemente hasta el año 36 en que estalló la guerra civil. Junto con sus hijos tiene que pasar a la zona republicana pues aquí sus vidas corrían peligro. La fábrica quedó parada.

Imagen de MA. Jabón casero hecho por mi madre hace tiempo.


Pasaron por los pueblos de Guadix y Purullena y en este último también fabricaron jabón durante seis meses. Después de esto se asientan en Diezma. Con la ayuda del Gobierno Republicano y de sus hijos vuelven a trabajar de nuevo el jabón durante los tres años de la contienda.

Al finalizar la guerra en el año 39 regresan a su pueblo y después de pasar tanto él como sus hijos, por cárceles, batallones de trabajadores, y otros muchos apuros, levantan de nuevo la fábrica y trabajan más fuerte que nunca, incorporándose a este quehacer algunos de sus nietos mayores que ayudábamos a troquelar y embalar el jabón. De esta fábrica vivíamos siete familias.

Otro contratiempo les acecha: los detergentes. Estos hacen que se consuma menos jabón y fue la venta en decadencia hasta que la fábrica desapareció definitivamente, allá por la década de los 50.

Ángeles Garrido Garrido.
Texto publicado en la revista La Capa.
 Agosto 1994-Numero 8.

Gracias amigas y amigos por los comentarios.