Hola mundo, hola amigas y amigos, lectores comentaristas blogueros de El blog de MA,
Twitter y Facebook, hoy un post nuevo con mis pensamientos escritos en una poesía de mi autoría.
Hermana Soledad
Es muy sabio decir: Yo soy yo y tú eres tú.
Hermana Soledad.Soledad compartida.
Soledad amada.Soledad deseada.
Hermana Soledad, estamos en soledades.
Yo soy yo y tú eres tú y habitamos en la misma alma.
MA.
ResponderEliminar"En soledad vivía en soledad ha puesto ya su nido/ y en soledad la guía a solas su querido/también en soledad de amor herido/.
(Juan de la Cruz)
Hay una soledad interior deseada, no la soledad impuesta.
Besos, versos y flores.
Hola MA, la soledad forma parte de la vida, nos hace crecer espiritualmente.
ResponderEliminarEs como bien dices en tu poema: nuestra hermana Soledad.
Besos.
María.
Gracias María por tu huella y comentario.
EliminarSoledad tiene nombre de mujer y acompaña a los hombres en sus vidas solitarias.
Besos y feliz día.
MA.
El blog de MA.
Gracias, muchas gracias María por tu huella y comentario.
ResponderEliminarNuestra hermana soledad tiene el corazón compartido con el nuestro en soledades...
Besos, versos y flores.
MA.
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Desnuda soledad de dos almas hermanas.
ResponderEliminarDuelo de silencio.
Un abrazo
Nono.
Gracias Nono por tu comentario.
EliminarMe gusta tu pensamiento escrito sobre la soledad.
Besos y feliz vida.
MA.
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Hola mi querida Ma, hay una soledad deseable que me atrae a Dios.
ResponderEliminarTe dejo algo que escribí hace algún tiempo.
Un gran abrazo.
MI PLEITO PROSA
¡Qué mal nos lleva la soledad, cuando el invierno nos atenaza en las mismas puertas del alma y nos despecha las entrañas con transeúntes quejidos sordos que tanto nos atemorizan y espantan!
Nos lapidan los recuerdos de forma inhumana, los deforman de tal manera, que no se halla salida posible a sus acechanzas y las pestañas se quedan espantadas al no hallar como evitarla.
Se lamentan hasta los huesos, que envejecidos no hallan reposo a sus dolores, aún sin estar enfermos, se quejan de la soledad de no encontrar otros huesos que les acompañen.
¡Maldita sea la soledad! que nos quita la belleza de la vida, nos nubla el raciocinio, nos quiebra la esperanza y atiza el fuego para que arda la tristeza.
Con ella yo me pleiteo, estoy más que cansada. No la quiero en mi casa.
Levantaré mi espada firme hasta derrotarla. No escribiré en mis poemas ni una sola palabra que la haga necesaria.
La ignoraré, pondré cerrojos en mis puertas del alma, cerraré el corazón a sus llamadas y no dejaré que me quite los días que me quedan, cada vez que se presente disfrazada de bella compañía, cual si fuere una gran dama.
Le clavaré mi espada hasta matarla y lo haré, mientras mi Dios me sostenga, porque sé que Él me acompaña.
Autor Sor. Cecilia Codina Masachs
Hermosa poesía me regalas querida Cecilia con tu Pleito en Prosa dedicado a la soledad.
ResponderEliminarFelicitaciones.
La hermana Soledad... es una forma de encuentro con Dios y con nuestra verdad más honda, mediante el silencio meditado en soledad crece el alma en la luz divina...
Besos, versos y flores.
MA.
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